¡Hola Comunidad!
Dejo mi caso y una pregunta para la dirección de Airbnb, pero puede quedar abierta para pensar una respuesta entre todos.
Como en otras ciudades, en Buenos Aires la situación macroeconómica hace que mucha más gente alquile sus pisos a través de airbnb para generar otras fuentes de ingresos. Y a su vez, a pesar de que la ciudad "es más barata" que antes para un extrangero, la demanda no ha crecido.
Esto hace prácticamente imposible ofrecer un piso o una habitación con un margen de ganancias que justifique el trabajo que lleva un buen servicio.
Hay que bajar los precios para ser competitivos, ya no con otros sistemas de hospedaje, sino con gente que los ofrece a precios por debajo de lo posible para hacerse lugar en el mercado, o para no perder dinero con el piso desocupado. Y solo da malos resultados...
- Huéspedes sin interés por el hospedaje.
Yo me vi envuelto en esto: bajé los precios por miedo a tener el piso desocupado, los huéspedes que recibí no tenían interés por la calidad del servicio (ni respeto por el espacio) y tampoco dejaron calificaciones. Así perdí mi categoría de Super Host. - Anfitriones que no gana dinero.
Con las Sugerencias de precio en el calendario, resultado de un algoritmo que deja afuera muchas variables, acabamos jugando a una subasta por "quién pide menos". Los que pueden afrontar ganancias por debajo de los costos, subsisten (por ahora).
Entonces: en un mercado saturado, ¿cómo vamos a conseguir un margen de ganancias rentable si no crece la demanda?
Yo no encuentro respuesta, por eso pregunto a airbnb, en particular: ¿cómo hará para que crezca la demanda, o para que se regule la oferta sin que los anfitriones quebremos, o busquemos otras alternativas? ¿O lo dejarán suelto a una subasta por "quién pide menos"?
¡Muchas gracias!
Brian