Es cierto que la magia de La Habana es estar congelada en el tiempo. Somos como un museo rodeado de playa, sol, rumba, tabaco y ron donde convergen autos de los años 50 y edificios antiguos en ruinas mezclados con ciertos destellos de una arquitectura moderna. Sin embargo, somos mucho más que eso y los turistas también quieren sentir nuestra cultura y su belleza, conocer la ciudad antes de que todo cambie y se modernice. Esto lo saben bien los viajeros que optan por reservar en Airbnb, pues son aquellos que no eligen el turismo de "pulsera", el del "all inclusive" que los mantiene en su zona de confort y los aleja de la felicidad de conocer la Cuba real y la calidez humana de su gente.
No obstante, acercarse a nuestro modo de vida y a nuestra cultura implica afrontar y entender las particularidades de la isla donde el acceso limitado a Internet, la escasez de productos básicos, el déficit de los servicios de transportación y la dualidad monetaria son el escenario de cada día para los cubanos y puede resultar agobiante y difícil de entender para aquellos que visitan el país. Desde que comenzamos a rentar nuestro apartamento comprendí que una de las premisas fundamentales era la PROACTIVIDAD, o sea, tener la capacidad de adelantarse a las necesidades de los huéspedes y de este modo solucionar los obstáculos mencionados anteriormente de manera rápida y efectiva:
Acceso limitado a Internet
El acceso a Internet en Cuba es muy limitado y la conexión wifi no es gratis. Tanto locales como turistas deben acudir a los puntos de venta de Etecsa, única compañía de telecomunicaciones existente, para comprar tarjetas y así acceder a Internet. En julio de 2019 entraron en vigor nuevas regulaciones y se ha abierto otra posibilidad para el sector privado de conectarse al servicio wifi desde las casas, pero es necesario estar muy cerca de las zonas donde existe la señal, ya que los equipos permitidos para obtenerla tienen que cumplir requerimientos de frecuencia y además se adquieren a un elevado costo. Por esta razón muchos anfitriones aún se ven limitados a ofrecer dicho servicio. Esto propicia la pérdida de reservas, pues el acceso a Internet es un requisito indispensable y no negociable para muchos viajeros.
Inmersos en este panorama desfavorable, donde la demanda supera la oferta y la escasez de tarjetas para conectarse a Internet prevalece, algunos anfitriones optamos por proveer dichas tarjetas al mismo precio de costo durante el check in. Recientemente el gobierno cubano implementó el servicio de Internet desde celulares mediante datos móviles, lo cual ha permitido administrar con mayor eficiencia las reservas online. En nuestro caso le damos al huésped un celular con línea nacional con la posibilidad de incorporar los datos móviles. De este modo los viajeros que vienen a visitar diferentes provincias pueden comunicarse con sus otros anfitriones y coordinar los próximos check in, excursiones, etc. Del mismo modo, aquellos que no vienen con una ruta establecida pueden reservar por Internet, ya sea mediante wifi utilizando las tarjetas o con los datos móviles.
Escasez de productos
Desde inicios de 2019 Cuba está al borde de una crisis y la escasez de productos alcanza su máxima expresión, no solamente a causa del bloqueo económico por parte de los Estados Unidos y por los problemas internos asociados al modelo económico cubano socialista, sino también porque el país no dispone de liquidez para acometer las importaciones. La acumulación de deudas y el no otorgamiento de créditos a corto plazo son parte de este desfavorable círculo vicioso que obliga al gobierno cubano a regular la venta de alimentos y productos. En medio de este terreno hostil donde predomina la escasez los negocios privados se ven afectados y para los anfitriones es muy complicado mantener el abastecimiento de elementos básicos como sábanas, toallas, detergente, papel sanitario, etc así como garantizar un adecuado mantenimiento de las viviendas por el déficit de materiales de construcción y electrodomésticos.Tenemos entonces dos caminos: dejar de ofertar ciertos productos arriesgándonos a que la calidad del servicio sea deficiente o tratar de que el problema nos afecte en menor medida. Muchos anfitriones cubanos destinamos un fondo mayor para la compra de artículos y disponer así de un mayor stock de artículos. El acaparamiento constituye una alternativa y hay que contar con el tiempo para localizar los productos, hacer largas colas para adquirirlos, etc. En nuestro caso como cortesía proveemos a nuestros huéspedes con ciertos alimentos que son difíciles de adquirir, algunos los damos como regalo y otros al mismo precio de costo para que elaboren su desayuno o cena ligera si lo desean.
Dualidad monetaria
En la isla existen dos monedas emitidas por el Banco Nacional de Cuba: el CUP (peso cubano) y el CUC (peso cubano convertible). El sector del turismo trabaja con CUC. La moneda extranjera que trae el turista es cambiada por CUC para utilizar en paladares o restaurantes, clubes nocturnos y tiendas. En los mall, los productos aparecen con dos precios. El superior indica el valor en CUP y el inferior es en CUC. Para adquirir frutas, hortalizas y verduras los precios que aparecen en la tablilla son siempre en CUP, aunque aceptan el CUC con la respectiva tasa de cambio (1 CUC= 23 – 25 CUP). El tema es complejo para los cubanos y para los turistas es agotador, más aún cuando no hablan el mismo idioma. No es raro que los turistas paguen en CUC y reciban el cambio en CUP perdiendo así mucho dinero. Por ello en el check in es muy importante explicarles este aspecto. Nosotros elaboramos una guía y en los tips aparece una foto con ambos tipos de billetes. ¿Un consejo para distinguirlos? Los CUC tienen impresos monumentos y los CUP tienen rostros de héroes.
Déficit de los servicios de transportación
En el país no existe ninguna aplicación de servicios de transportación como Uber o Lyft. El costo de rentar un auto por las vías oficiales suele estar en el rango mínimo de 60 USD diarios sin incluir el combustible y en la mayoría de los casos los turistas desechan esta opción por su elevado costo.Los precios más competitivos de transportación los ofrece la empresa Viazul y sus buses con destino a todas las provincias, sin embargo en diversas ocasiones no hay disponibilidad de boletos por la elevada demanda. Como paliativo a este problema muchos anfitriones poseemos contactos que gestionan flotas de taxis colectivos y privados en todas las provincias del país a precios razonables para propiciar el traslado de nuestros huéspedes. Ofertas de excursiones, citytours y autos convertibles son parte de la gama de servicios brindados.
A pesar de las adversidades el sector privado en Cuba dedicado a rentar sus viviendas ha sabido generar una respuesta adecuada ante los problemas y los huéspedes en su mayoría agradecen nuestro esfuerzo en brindar un servicio de calidad. Hoy día nos enorgullece ser uno de los mercados de mayor crecimiento de Airbnb.
