Lo primero muchas gracias a todos por la información al respecto.
He de decir que me parece una verdadera vergüenza es la dirección que han tomado al regular la actividad, ya que, en lugar de favorecer el uso de las economías y plataformas colaborativas y tomar medidas que realmente eviten la gentrificación y el tipo de turismo molesto y masificado que se está dando en ciudades como Barcelona, que al fin y al cabo es de lo que va Airbnb y similares; han optado por favorecer la parte empresarial del asunto, y por supuesto, introducir una innumerable serie de trabas a nivel requisitos casi imposibles de cumplir, burocracias y certificados de 1000 tipos necesarios para que básicamente solo pueda dedicarse a ello la gente que lo plantee como un negocio y que los hoteles y similares sigan campando a sus anchas en su cortijo.
Una vez más, una brillante gestion de la Junta de Castilla y León.
Desde Valladolid nos sumaremos sin duda a cualquier tipo de iniciativa ciudadana contunta para recurrir esta flagrante normativa que nos priva de una de las actividades clave de nuestro día a día.