Pues me autorespondo con lo que creo que Airbnb podría o debería hacer:
Reducción de comisiones
Una vez que se pueda volver a viajar con normalidad, todavía la gente tendrá miedo. Además con la previsible crisis/recesión la gente tendrá menos dinero para viajar. En esta situación una reducción de comisiones permitiría que haya más viajeros y que más dinero de su presupuesto pueda ir al host y menos a las comisiones. Obviamente Airbnb tendría que hacer también ajustes de estructura para reducir gastos y que el impacto en sus cuentas no fuera salvaje.
Adelanto de pagos a los host a cuenta de sus futuras reservas
Esto es algo que algunos mayoristas de viajes a hacen. Entregan un dinero en depósito en invierno a los hoteles a cambio de un descuento en las reservas de verano. Pues imaginad que ahora Airbnb pudiera calcular la media de ingresos que un host hará desde junio a diciembre. En base a esto, Airbnb ingresaría a cada host un importe concreto "a cuenta" de futuras reservas. Para Airbnb esto sería un riesgo considerable en el caso de que haya hosts que tomaran dinero y luego no tuvieran reservas porque su negocio cierre o similar. Pero supongo que Airbnb, teniendo acceso a capital y con excelentes programadores y analistas de riesgo podría calcular a quién le puede prestar o no dinero: igual que haría un banco. Lógicamente esto sólo sería útil para hosts con un historial suficiente de tiempo como hosts.
Restricción de nuevos alojamientos
Airbnb podría no permitir que se añadan nuevos espacios a Airbnb. Esto reduciría (o al menos mantendría) la oferta fija. Así se favorecería a los hosts actuales que han sufrido la crisis.
Favorecer a pequeños hosts
Creo que Airbnb ha cometido el error de tener una comunicación demasiado optimista con respecto a su funcionamiento para hosts. Todos hemos visto los mensajes de "invita a tus amigos para ser anfitriones" pero más aún los de "alojando en [tu ciudad] podrías ganar hasta xxx€/$ al mes". Si el enfoque ha ido no solo a pequeños empresarios sino a particulares que nunca antes habían tenido un negocio, deberían haber sido más cautos en la comunicación y explicar mejor que si esto es un pequeño negocio hay que saber controlar gastos, ingresos e inversiones... pero ademas estar preparados para momentos de crisis como esta. Porque suceden y van a seguir sucediendo. A no lo mejor no globalmente, pero por seguro localmente: una oleada de ataques terroristas, un escape de una central nuclear... Los hosts tenemos que estar preparados para estas situaciones.
Pues en relación a esto, Airbnb podría decidir apoyar más a los anfitriones individuales (que alquilan habitaciones en su casa, o una segunda residencia), que a los anfitriones profesionales que tienen un negocio de 2, 3 o mas espacios.
Saludos.