Hola @Gerardo448
La mayoría de huéspedes van a ser excelentes. Unos pocos te van a dar problemas, por un motivo o por otro. Pero con un número de reservas suficientes, te van a tocar. Así que a la vez que disfrutas de cuando todo vaya perfecto, tienes que estar preparado para el día que la cosa se complique y tomártelo como una cosa normal del negocio. Cosas que te irán pasando:
- Huésped sale más tarde de la hora de salida (se queda dormido, se olvida, te cuenta un rollo tremendo... ) y tienes a los que quieren entra ya casi en la puerta.
- Se rompe un electrodoméstico y tienes que salir corriendo a reemplazarlo o a buscar un técnico a toda prisa.
- Te falla la persona de la limpieza o cualquier otro colaborador que tengas.
- Te dejan todo sucio y tardas en limpiar 3 veces más de lo normal.
- Rompen algo y tienes que hacer una reclamación a Airbnb.
- Tienes un huésped desagradable que le parece todo mal y que seguramente no ha leído ni la descripción del anuncio ni las valoraciones.
-Tienes un huésped que no se comunica. El día de llegada no sabes dónde está ni a qué hora aparecerá.
- Los huéspedes hacen ruido, molestan a los vecinos o incumple una norma de tu Comunidad de Vecinos.
Cuando yo veo por aquí hosts enfadados, muchas veces es porque se toman esto como algo personal y tienen mucho apego a algo del espacio que alquilan. Así que comprueba que no haya nada que si te lo rompen o ensucian, el único problema sea encontrar otro y pagarlo, pero que no haya una carga emocional.
Un saludo
