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Hojin Chang y su mujer, Sarah, necesitaban romper con la rutina diaria. Corría el año 2014 y ambos trabajaban para la misma empresa de componentes electrónicos en Seúl. Mientras que él trabajaba en ventas, ella se reunía con inversores y clientes importantes. Tenían unos trabajos por los que muchos jóvenes profesionales pagarían, pero el estrés y las largas horas eran agotadoras.
«Llegábamos a la empresa a primera hora de la mañana y volvíamos tarde cada noche», explica Hojin. No les quedaba tiempo para estar juntos. «Renunciamos al trabajo y nos fuimos a dar la vuelta al mundo», añade.
Dar la vuelta al mundo te enseña mucho acerca de la hospitalidad
«Vuelta al mundo» es una descripción adecuada para la odisea de la pareja: viajaron durante 430 días y visitaron 30 países de los cinco continentes. En la mayoría de los sitios que visitaron se hospedaron en alojamientos en Airbnb. La experiencia les enseñó mucho sobre la importancia de las relaciones humanas en la hospitalidad. «Conocimos a muchos anfitriones maravillosos», cuenta Hojin.
Uno de los puntos más destacados del viaje fue una estancia prolongada en El Calafate, una pequeña localidad de la Patagonia argentina que sirve como puerta de entrada a algunos de los glaciares más espectaculares del mundo. Allí tuvieron la oportunidad de experimentar en primera persona la otra cara de la hospitalidad y empezaron a verse no solo como huéspedes en busca de atenciones, sino también como posibles anfitriones.
Llegaron a esa localidad remota con la intención de dejarla atrás rápidamente, pero terminaron por conectar con la pareja japonesa-coreana que regentaba Fuji Guest House, donde se alojaban. Resultó que los dueños de Fuji buscaban algo de ayuda. Interesados en la oportunidad, Hojin y Sarah se ofrecieron voluntarios. A lo largo de las dos semanas siguientes, aprendieron cómo se organizaba el servicio de habitaciones, la limpieza, la gestión de horarios y otros aspectos básicos para una empresa del sector de la hospitalidad. «Queríamos conocer de cerca ese tipo de trabajo», afirma Hojin.
En busca de un nuevo estilo de vida
El viaje les ayudó a afianzar su unión. También les dejó una cosa clara: no querían volver a su competitivo entorno laboral. Deseaban formar una familia y la presión de sus trabajos en empresas no les permitiría ser el tipo de padres que querían.
Y entonces llegó una oportunidad. La pareja descubrió que Airbnb quería ampliar su presencia en Seúl y estaba organizando un concurso. Los ganadores recibirían la ayuda de la empresa para preparar una habitación en su hogar en la que recibir a posibles huéspedes. Hojin y Sarah fueron dos de los cuatro seleccionados entre 3000 participantes. «Vinieron y nos montaron una habitación para alojar huéspedes en casa», cuenta Hojin. «En ese momento, me di cuenta de que era una buena oportunidad para empezar a hospedar con Airbnb».
Convirtieron un espacio de lo más aburrido en una habitación bien iluminada, moderna y acogedora, y comenzaron a ganar algo de dinero sin tener que volver a su agitada vida profesional. Les gustaba hospedar, especialmente charlar con los huéspedes, que les recordaba a sus días de trotamundos.
Más que un trabajo, una afición
No obstante, cuando Sarah se quedó embarazada, ese dinero extra dejó de ser suficiente. Tenían que ampliar la actividad o dedicarse a otra cosa. Entonces, Hojin decidió crear House of Sarah, una empresa que ponía sus conocimientos sobre hospitalidad y gestión a disposición de otros propietarios que buscaban beneficiarse de la creciente popularidad de Airbnb.
Cuatro meses después de hospedar por primera vez en su casa, la pareja encontró una propiedad más antigua, pero por lo demás perfecta. Era ideal para los viajeros que querían estar cerca de todo lo que ofrece Seúl, y Hojin convenció al propietario para que le dejara arreglarla y fuera más acogedora. Hoy en día, House of Sarah gestiona 20 propiedades y ofrece a sus propietarios la opción de compartir su vivienda sin preocupaciones. En la empresa trabajan cuatro personas (dos gestores y dos trabajadores de mantenimiento), además de Hojin.
Lo que aprendieron durante su estancia en Fuji Guest House sigue siendo fundamental para gran parte de su actividad en Seúl. Allí fue donde comprendieron, explica Hojin, por qué la atención al detalle es tan importante en la hospitalidad. Cuando los huéspedes están lejos de su hogar, los pequeños detalles que les hacen sentir bien cobran mucha importancia.
Hospedar con un toque personal
«Entendemos lo importantes que son los alojamientos para los viajeros, así que nos centramos en la seguridad y la limpieza», explica Hojin. «Quiero que nuestro establecimiento sea igual de acogedor [que Fuji] para nuestros huéspedes en Airbnb». Seúl es una especie de encrucijada en Asia, lo que a menudo implica recibir huéspedes de China, Malasia o Japón con sus respectivas barreras culturales y lingüísticas. Hojin se encarga de que los huéspedes tengan acceso a alimentos que les permitan sentirse como en casa y de que sepan dónde encontrar el último grito de K-Pop.
«Cuando recibo a los huéspedes a su llegada, les explico cómo funciona el alojamiento y cómo deben usar cada cosa», explica Hojin. «En ese momento, siempre añado "Si quieres pedir pollo frito o comida china, podemos ayudarte. ¡No te preocupes!"».
Cuatro años después de su aventura como trotamundos, Hojin y Sarah afirman haber encontrado el equilibrio que buscaban al dejar su trabajo anterior. La empresa House of Sarah les da la oportunidad de pasar mucho tiempo juntos con su hijo, que ya da sus primeros pasos. A medida que expanden su negocio, siguen intentando replicar la hospitalidad que conocieron en la Patagonia. Cada vez que un huésped se pone en contacto con ellos con alguna petición, añade Hojin: «Les ayudamos con gusto porque podemos ponernos en su lugar».
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Esta historia como muchas otras unicamente pueden pasar si te enfocas y tienes hambre de crear riqueza, "Aquello en lo que te centras se expande", esta pareja definitiviamente se centro en lo que queria y ahi estan los resultados.
Ademas de eso, previamente se prepararon conociendo sobre el negocio, aunque no conocieron todo al 100% como anfitriones, tomaron accion que es lo importante, me recordaron de un libro que lei en donde el autor en uno de sus cursos prepara a la gente para que acceda a su poder interior y trunfe a pesar de todo. En ese curso enseña un principio conocido como <Preparados, fuego, apunten!> ¿Que es lo que quiere decir? Preparate lo mejor que puedas en el menor tiempo posible y pasa a la accion; despues ve corrigiendo sobre el camino. Enhorabuena por esta pareja
Saludos desde Torreon, Coah. Mexico
Cojo idea, esp de ofrecetles un abanico de posibilidades a elegir ir una comida, que la lleven a casa, darles varios folletos de diferentes restaurantes y diferentes comidas es muy buena idea, gracias
Cada anfitrión tiene una historia que contar: al sumergirme en la historia de Hojin Chang y su mujer Sarah, recuerdo mi primer hospedaje, me sentía un poco torpe y con muchas ganas de que las cosas salieran bien; con el tiempo y después de haber tenido distintas experiencias, me siento muy profesional y que cada huésped nos ofrece una nueva oportunidad de conocer otros países sin tener que viajar, Tener frente a ti una persona con otra cultura diferente a la tuya y que esa persona se sienta confiada en tu casa es verdaderamente una aventura.
¡Que interesante historia! Siguen motivando para seguir en airbnb por muchos años más! Gracias!
Desde mi atalaya de Super Host durante 4 años, puedo añadir que lo más importante hasta ahora, ha sido el trato personal. Dar a los huéspedes la bienvenida con una sonrisa, un abrazo, ponerte a su disposición los primeros momentos. Indicarles los lugares más interesantes, restaurantes, auditorios, playas... Y tratar de indicarles también los lugares donde no debieran ir por no tener mayor interés, a pesar de figurar en algunos folletos turísticos. ¡Y la mejor paella!
Excelente historia de la House of Sara, yo soy anfitrión de dos casas una en Nicaragua y otra en Mexico. Trato de ser muy atento con mis huéspedes y ofrecerles opciones de entretenimiento cuando se hospedan en casa, pero sin duda la mejor acción es ofrecer un alojamiento impecablemente limpio y con servicio personalizado: unas flores de bienvenida, algo de tomar en el refrigerador y una persona que les explique las reglas de la casa son una excelente receta para tener una buena evaluación!
Excelente ejemplo de crecimiento económico y personal a través de tomar acción en lo que realmente nos apasiona. Como la historia de esta pareja para cada anfitrión seguro que también existen mil historias para compartir, porque iniciar una actividad nueva conlleva a crecer paso a paso; prueba y error pero con la ayuda de estos comentarios nos animan a ser los mejores anfitriones dando siempre más de lo que esperan nuestros huéspedes. La creatividad y la imaginación son la clave al éxito. Un abrazo para todos esos anfitriones que hacen de su estancia una inolvidable experiencia.
Me parece muy bien la información y sobre todo que se pueda hacer una realidad en el corto plazo, para que se pueda imitar y mejorar, muchas gracias!