Buenos días @Antonio-Luis0
Usted y yo no solo pensamos igual, sino que actuamos igual.
Yo siempre digo que la comunicación sincera, llana y directa es la clave al éxito en la vida y mucho más en este momento de nuestras vidas como anfitriones.
El paradigma cambia cuando alguien sabe y lo haces sentir que esperas de el o ella su mejor versión y que estas ahí para ellos sea lo que necesiten.
Yo también dejo guía de huésped y reglas claras sin rodeos.
Y al final en su salida les envío todo lo que deseo que realicen como apoyo y entre ellas está el que me comuniquen si algo se rompió o cualquier inconveniente que no sea una sorpresa.
Y Luis me dicen de manera sincera como ya les dije que soy, que se rompió un vaso, o un plato en fin cosas pequeñas y mi respuesta es: todos están bien, ninguno se corto, verdad?
Me han respondido que no paso nada.
Y les digo gracias a Dios. No se preocupen yo lo repongo, a ustedes gracias por la sinceridad y sigan disfrutando.
Esto hace que me dejan la casa como si no hubieran habido huésped y son huésped que regresan o te promueven.
En una ocasión un Niño en la litera saltó tanto que tumbó la cama, les envié al de mantenimiento de los na vez, la arreglo en 5 minutos, la reforzó y a Dios gracias que el bebo estaba súper bien.
Y esos regresaron nuevamente a mi hogar meses depues.
Creo que lo qué hay que hacer es no ver al huésped como el enemigo, por el contrario es nuestro aliado, y si lo tratamos bien con respeto y empatía, se convertirá en amigos.
Solo hay que recibirlos y tratarlos como si fuera una familia quien viene.
Si somos negativos me ideas que nos hacemos. Eso se convertirá en realidad, porque ya estamos asumiéndolos de manera negativa. Así qué hay que ser positivo y empaticos.
Un abrazo y un gusto enorme Luis.
Bendiciones en abundancia. Imilka.
Imilka de Díaz