Hola a todos,
Aquí tenéis una nueva entrada en el Cuaderno de bitácora de @Lizzie.
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Cuaderno de bitácora: Días 3, 4 y 5
Ubicación: Tokio - Sidney
Duración de la visita: 2-4 de abril (Tokio) / 5-6 (Sydney) / 6-7 (Adelaida)
Distancia recorrida (hasta el momento): 11532 millas / 18555 kilómetros
Hola, hola, hola,
Los últimos días han pasado en un abrir y cerrar de ojos, en especial por un vuelo de ¡10 horas! Así que, he querido ponerme al día y haceros un resumen de los últimos días.
4 de abril
Comencé mi último día en Tokio con otro maravilloso desayuno de Yagi, ¡esta vez con un dumpling de carne! Ha sido un placer conocerlo y ver su alegría por ser anfitrión y por conocernos el uno al otro. Una cosa que no supe hasta el último minuto es que él es un artista entusiasta y que las obras de arte que colgaban de las paredes eran, en realidad, de su propia creación. Y como regalo había hacho uno para mí, que se traduce en "gentil sonrisa".
De camino a la oficina aprendí que es mejor no viajar con una maleta en hora punta en Tokio, es un consejo que comparto con vosotros. Llegué a la estación para ver trenes tan llenos de gente que tenían las caras apretadas contra la ventana, empecé a pensar hmmm....¿realmente quiero pasar por eso? ¿Y si vacío la maleta y me pongo toda mi ropa?
El resto del día lo pasamos con el maravilloso equipo de Japón que hay en la oficina. Fue un verdadero placer visitar al equipo, son muy entusiastas, les gusta la comunidad y saben cómo dar la bienvenida a los invitados. Echad un vistazo a esta bandeja de comida.
Y, más tarde, ese mismo día, llegó el momento de ir al aeropuerto para tomar un vuelo nocturno a.... ¡Sydney!
5 de abril
Por arte de magia....10 horas y unas 2 horas de sueño después( y un poco de llanto por una película en el avión) llegamos a un calurosa Sydney, muy diferente a la temperatura de Tokio. Yo, por supuesto, estaba preparada para esto....con mi jersey grueso, mi abrigo, mis calcetines y mi bufanda….¡vamos! 🙂
No podía hacer el check-in en mi Airbnb hasta más tarde, así que me dirigí a la oficina de Sydney y aproveché para tomar una ducha.
Más tarde organizamos y grabamos una sesión de preguntas y respuestas con público en vivo. Tuvimos un grupo de anfitriones de toda Australia participando, el ambiente fue relajado, un poco diferente a algunas de nuestras anteriores sesiones de preguntas y respuestas. Recuerdo que muchos de vosotros me comentasteis lo que se siente distéis vuestra opinión sobre las anteriores sesiones de preguntas y respuestas, así que espero saber la opinión de esta sesión y estoy segura de que los anfitriones australianos no os decepcionaran con sus preguntas. El equipo está trabajando en una versión del video para compartir con todos vosotros - ¡estad atentos!
6 de Abril
¡Ya casi estoy al día! Después de caer dormida con la ropa puesta en mi cama, finalmente pude descansar. ¡Yo hago las cosas con estilo! Desafortunadamente, no pude pasar mucho tiempo con mi anfitriona ya que básicamente sólo estuve allí unas pocas horas, pero la habitación privada y la casa de Sonya son encantadoras. La cama era tan cómoda que se me hacía muy difícil salir de ella y tuvo unos detalles, como esta cesta de toallas, que me sentaron muy bien. Espero volver a visitarla en un futuro cercano.
Por la mañana, un grupo de 40 a 50 personas se reunieron para hablar sobre la comunidad. Fue un día lleno de presentaciones de los anfitriones y de los miembros del equipo de Airbnb, Laura Chambers se unió a nosotros para discutir en torno a los valores de la comunidad.
Tengo que decir que fue una sesión llena de energía, en la que los anfitriones dieron su opinión sobre qué valores que son importantes para ellos. En general sentí que para ellos hospedar es algo que les satisface y que puede ayudar a fortalecer a la comunidad local.
Fue genial conocer a tantos anfitriones australianos, gracias por recibirme. Me voy otra vez al aeropuerto, esta vez por mi cuenta, a Adelaida, para encontrarme con un anfitrión del Centro de la Comunidad.
Gracias,
Lizzie
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Espero que disfrutéis de su resumen y que os guste esta crónica de su viaje.
Sergi