La anfitriona de un alojamiento en el que me hospedé en Lisboa me acusó de haberle robado unos zapatos y me reclamó 80 euros por ello. La parte que me tiene más desconcertada es que el servicio de mediación de airbnb resolvió en favor de ella porque “su anfitrión reportó el daño antes de que el próximo invitado se registrara y proporcionó toda la documentación solicitada” y me han cobrado 60 euros del depósito sin que yo pueda reclamar de ninguna manera porque ya han tomado una decisión definitiva. Después de hacer mi reporta a la anfitriona, ha respondido diciendo que me ha puesto una denuncia y que le exige a airbnb que reitre mi reporte.
Aquí les detallo la historia. Es la primera vez que utilizo airbnb y estaba en Lisboa sin cobertura móvil ni internet. Cuado contacté con Soraya, me dijo que estaba fuera y que llegaría sobre las 18h. Llegué un poco antes de las 18h a la puerta de la casa y, como en el correo que recibí de airbnb no ponía el piso, estuve esperando en la calle unos 15 minutos. Después fui a buscar un lugar con wifi para poder contactar con ella y cuando le dije, un poco molesta por la situación, que había estado esperando en la calle, se enfadó. Me preguntó que si yo pensaba que ella vivía en la calle, que llevaba una hora esperándome y que por mi culpa iba a llegar a tarde a la facultad. Ella estaba bastante enfadada y yo muy cansanda y le dije que podía irme a otro lugar. Me dijo que la tendría que indemnizar, así que decidí quedarme. Después de explicarme cómo funcionaba el agua caliente y de darme las llaves, se fue a una habitación a hablar por skype con alguien. Después de unos 15 minutos salí a pasear por Lisboa, ya que solo tenía una tarde y tenía que salir para el aeropuerto a las 6 de la mañana. Cuando regresé, sobre las 23h me dijo que le tenía que dar un número (por estar muy cansada primero entendí que era el de reserva, después me di cuenta de que era el de dni), pero que se lo podía dar al día siguiente. Yo le avisé de que me iba a las 6h y me dijo que no había ningún problema. Por la mañana me fui y cuando llegué a Barcelona vi que me había mandado toda una serie de mensajes en los que me acusaba de haberle robado sus zapatos y me exigía que le pagara 80 euros por ellos. Empecé a recibir toda una serie de mensajes en los que me decía que ella tendría que haber llamado a la policía cuando yo la dejé hablando sola y me fui de la casa cerrándole la puerta en la cara sin permitirle hacer el check-in.
Veo que es una anfitriona que tiene muy buenas evaluaciones, pero existe una experiencia parecida a la mía en 2015. Lo que más me impresiona de todo esto es que airbnb me hace culpable de un delito de hurto sin que contemple ningún mecanismo para que yo pueda defenderme. Muy decepcionante, además de surrealista.