No ha sido fácil pero si divertido.
Para mi como anfitrión y retomando lo que digiera Marc Auge el antropólogo francés, los espacios de hospedaje mayormente son "no lugares", pues yo creo que a pesar de las grandes invenciones de dinero que destinas las marcas internacionales en la diferenciación de sus complejos sistemas de alojamiento cuando uno llega al hotel no importa donde estemos y cual sea la imagen institucional y la identidad de la marca. Los hoteles tradicionales representan el acaparamiento impersonal del espacio. El impacto a los sentidos es el mismo, sus olores distintivos, colores, y amenidades representan la aburrida tradición hotelera del siglo XX. Por eso estoy feliz con el modelo de Air bnb.
Ser un "host" Air bnb representa hoy por hoy la democratización de los espacios de hospedaje para el cobijo humano que desde mi unto de vista critico enmarca tres grandes factores de diferenciación, la autenticidad de la estancia al estar en espacios únicos e irrepetibles, la humanización del modelo como una opción en equilibrio (comercio justo), y la producción de topo-filias (Yi fu-Tuán) con un gran sentido de ecología humana.
En este sentido del espacio en interacción con usuarios de diversas formas de vida multiculturales, trato en mis posibilidades de hacer pequeñas mejoras constantes. Después de que se marcha cada huésped al observar sus necesidades y hacer arqueología del espacio una ves que desocupan mis departamentos descubro posibilidades, analizo las conversaciones y veo sus trayectorias a traces del uso de los objetos del apartamento y como se relacionan con el espacio. Me detengo en sus evaluaciones y sugerencias. Esto me da un mapa físico de las necesidades de ellos.
Al menos esto me permite reflexionar sobre como poder ofrecer en la medida posible un espacio cada ves mas centrado en el huésped internacional. Y teniendo la flexibilidad de colocar objetos simbólicos de acuerdo al perfil de cada viajero para hacer más amena su estancia. Por ejemplo los latinos buscan especias en la alacena y colores vivos en la algunos toques de la decoración o y las mujeres necesitan de espejos grandes. Los franceses aman una cristalería agradable; el café y el buen te en la alacena son dos buenos aliados para los angloparlantes. Poner flores frescas normalmente causa un buen impacto.
Los grandes cambios se hacen de pequeños detalles en mis espacios siempre hay cambios y subo las fotos para que los nuevos huéspedes lo vean tal cual es a su llegada.